Una de las leyendas más populares de Salto, departamento al que dedicamos un ciclo especial gracias a la colaboración de Diego Moraes.
En nuestro ciclo de leyendas iniciamos un espacio dedicado a Salto, departamento fermental en lo que a historias sobrenaturales se refiere. Diego Moraes, colaborador para la ocasión, nos adelanta algunos capítulos de su libro "Bestiario del Salto Oriental". En esta entrega aparece en escena uno de los personajes espectrales más inquietantes de las tierras de Horacio Quiroga. La aparecida de la ruta 3
En nuestro ciclo de leyendas iniciamos un espacio dedicado a Salto, departamento fermental en lo que a historias sobrenaturales se refiere. Diego Moraes, colaborador para la ocasión, nos adelanta algunos capítulos de su libro "Bestiario del Salto Oriental". En esta entrega aparece en escena uno de los personajes espectrales más inquietantes de las tierras de Horacio Quiroga. La aparecida de la ruta 3
Diego Moraes (Salto, 23 / 2 / 79) es Licenciado en Letras por la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (UdelaR) y Procurador por la Facultad de Derecho (UdelaR). Ha colaborado también como redactor en varias publicaciones culturales, tales como Prima Cruzada (Montevideo) y La Ventana Magazine (Salto). Su libro "Bestiario del Salto Oriental. Antología de mitos y leyendas fantásticas del departamento" tuvo una primera edición (promocional, 50 ejemplares) y se prepara una segunda a través de Zujka Ediciones, 2007.
http://www.montevideo.com.uy/notleyendas_42946_1.html
"Víctima de su error"
Leyendas Urbanas: La tumba del soldado fusilado en Termas del Arapey
Las leyendas urbanas pueden definirse como narraciones de hechos presuntamente ocurridos en una ciudad o pueblo, pero que tienen más de tradicional o maravilloso que de histórico o verdadero.
Son historias cautivadoras, increíbles, excitantes y/o terroríficas, que circulan de boca en boca y tienden a considerarse como ciertas; o cuentos extravagantes pero contados como si se trataran de verdades indiscutibles, pero tienen patrones que revelan su carácter legendario. Pueden estar basadas o tener origen en un hecho que realmente ocurrió, consta de una estructura lógica interna que sostiene la narración, siempre "le sucedió al amigo de un amigo", es decir a terceras personas, no conocidas directamente y por lo tanto esas historias no se pueden verificar.
Generalmente la base es el miedo y muchas veces lo absurdo pero a pesar de ser así tiene credibilidad.
Las leyendas urbanas se han desarrollado junto y/o al margen de las tradiciones orales, formando parte de cada cultura desde el principio de los tiempos.
Pueden inspirarse en cualquier fuente, pero incluyen siempre un elemento de misterio o incompresibilidad que se siente amenazador, tras lo cual dejan una enseñanza moral.
En el interior están lo que se conoce más como cuentos rurales, por lo que podemos definirlas leyendas urbanas del interior.
"TUMBA DEL SOLDADO FUSILADO"
Al visitar Termas del Arapey, complejo turístico ubicado 80 Km. al norte de Salto, sobre costas del "Río de los Camalotes", que significa Arapey en el idioma guaraní, detrás del pequeño zoológico y frente al sinuoso afluente se puede observar una tumba que reza en su pedestal : "Víctima de su error".
La leyenda urbana que manifiestan los residentes nos lleva a una historia atrapada en misterio, tragedia y curiosidad.
El sepulcro, dicen, corresponde al Soldado Estanislao Silva, quien fuera ejecutado en el año 1903 por una sentencia de pena de muerte ante una conducta delictiva grave, que entre las versiones podría ser robo, lesiones u homicidio.
Lo que más se maneja en el boca a boca refiere a que en una misión de recorrida, el soldado habría dado muerte a un camarada de armas por desavenencias personales, ocultando el cadáver, y al regresar solo de la misión, informó a la superioridad que su compañero había desertado huyendo hacia la frontera.
Tiempo después, en una noche de copas y ebriedad, tal vez el peso de la conciencia ante el delito cometido, le hizo confesar antes terceros sobre el hecho, quienes denunciaron a la fuerza militar y Estanislao Silva, fue privado de su libertad, guiando a sus pares al lugar donde se encontraba enterrado el cadáver, consecuentemente fue privado de libertad y enjuiciado, recibiendo la pena de muerte por fusilamiento en un paredón.
Hoy ese paredón formaría parte de una cancha de frontón adyacente al local que hoy ocupa el Museo del Arma de Caballería en el corazón de Termas.
En aquel entonces era un Cuartel.
Pocos días antes de la ejecución, en ese año el Presidente del Uruguay, José Batlle y Ordoñez abolía la pena de muerte en todo el territorio, pero debido al tiempo que llevaba recorrer todos los rincones del país, a los mensajeros o correos oficiales denominados "Chasques", trasladándose a pie o a caballo; la noticia llegó poco después de la ejecución del Soldado. Las viejas normativas permitían a un superior decidir sobre el destino de un subalterno y de esa forma se considera que fue el último ejecutado de pena de muerte en el Uruguay.
Inmediatamente de la cruel y jurídicamente injusta muerte, el alma del soldado según testigos, hasta la actualidad es vista deambular en las madrugadas por el predio militar en cercanías a la cancha de frontón, vistiendo su uniforme de servicio. Otros testimonian escuchar en la frondosidad de los eucaliptos, la ráfaga de disparos que ocasionaron su muerte y los gritos de misericordia antes de ganar muerte.
La tumba del soldado fusilado, con un poco de leyenda y realidad, se ha convertido en una visita de agenda para los turistas, obligándolos a una pausa de reflexión en ese marco de exquisita naturaleza, amaneceres y atardeceres poéticos y el placer de aguas abrasadoras con atribuidos beneficios medicinales. (Colaboración de Francisco Alves). http://www.diarioelpueblo.com.uy/titular3.htm